El agitado ambiente que está marcando los días previos a la final de la Copa del Rey entre el Barcelona y el Athletic de Bilbao de este sábado no sólo corre a cuenta de los independentistas, que planean una gran pitada cuando suene el himno nacional en el estadio de fútbol del Barcelona. La Policía autonómica, que tiene la obligación de garantizar el orden público, quiere sacar beneficio de esta cita deportiva y negocia la posibilidad de cobrar por garantizar la seguridad en el partido que se celebrará el próximo sábado día 30 en Barcelona.

Según ha podido saber este diario, los Mossos d’Esquadra han pedido cobrar 35 euros por hora trabajada para cada agente, lo que supondría un coste millonario para la RFEF, mientras que la Policía Nacional, que es quien cubre estos eventos en el resto de comunidades, lo hace gratis. Fuentes de la Federación Española consultadas por este diario, negaron ayer que vayan a pagar el coste de este dispositivo. Sin embargo, desde los sindicatos de la Policía autonómica no se resignan a dejar de percibir unas cantidades que les corresponden por ley: «Ni por 15 Champions renunciaremos al cobro de ello».

La reclamación de los agentes autonómico se fundamenta en la aprobación, en enero de 2014, de la ley de medidas fiscales, administrativas, financieras y del sector público. En esta norma –en concreto, en su artículo 22.4-1– se aprueba el pago de una tasa en algunos supuestos como «la prestación del servicio policial con recursos extraordinarios, en cualquier acontecimiento deportivo que tenga lugar en recintos públicos o privados o en espacios públicos, para garantizar su correcto desarrollo durante el acontecimiento y el tiempo imprescindible anterior y posterior». En situaciones como ésta, se establece –en el artículo 22.4-4– que «la cuota de la tasa se fija en 35,35 euros por hora y persona destinada a la prestación del servicio solicitado».

Un evento de estas caraterísticas suelen cubrirlo alrededor de medio millar de agentes, lo que supondría un coste de más de 150.000 euros. El total previsto para esta cita en concreto será de 678 agentes: 12 grupos de Unidad de Intervención Policial de 45 cada uno –que suman 540 policías–; dos grupos de UPR de 30 agentes cada uno; 60 policías a caballo; 6 guías caninos; 10 agentes especializados en el subsuelo y otros dos en un helicóptero.

Esto implicará que tendrán que abonarse en torno a las 5.000 horas extraordinarias, lo que, a 35,35 euros cada uno, eleva el coste del dispositivo hasta los 174.720 euros.

Ambos clubes solicitaron el Santiago Bernabéu en primer lugar, pero el Real Madrid se negó a ceder su estadio. De esta forma, el Athletic propuso Sevilla y el FC Barcelona optó por Valencia, un desplazamiento más cercano en su caso. Sin embargo, la falta de acuerdo llevó a la Junta de la RFEF a proponer Barcelona o Bilbao como sedes. Al ser la opción elegida, se procedió a votar entre el feudo de los vascos o el de los catalanes. Finalmente venció el Camp Nou con 26 votos a favor. San Mamés obtuvo 16 y dos fueron abstenciones.